Desaparición del avión Douglas DC 4 - TC 48 - de la Fuerza Aérea Argentina

Douglas DC 4 - TC 48

El 3 de noviembre de 1965 desapareció en la selva de Talamanca, en Costa Rica, el avión argentino TC-48 con 68 personas a bordo entre cadetes, oficiales y suboficiales de la Fuerza Aérea Argentina. Nunca se los encontró, y el misterio se convirtió en leyenda en Costa Rica. Sin embargo en Argentina, la posición oficial fue de encubrir errores y olvidar el incidente a pesar del dolor y reclamos de sus familiares. Desde esa fecha es conocido como "El vuelo de los Cadetes".Imágenes del Simulador de Vuelo realizado por la Fuerza Aérea Argentina - Reconstrucción de las comunicaciones de radio e hipótesis del impacto. El 3 de noviembre de 1965 el TC48 desaparece en Costa Rica.

El 3 de noviembre de 1965 el Douglas DC 4 de la Fuerza Aérea Argentina desapareció luego de despegar de la base Howard, en Panamá. Pronto se lo dio por perdido en las aguas del Caribe con sus 68 pasajeros. El TC 48 pasaba así a la historia de las tragedias aéreas nacionales como "el avión de los cadetes", ya que llevaba a los miembros de la 31º promoción de la Escuela de Aviación Militar. Los familiares nunca creyeron en la historia oficial; llegaron a escuchar que a sus maridos e hijos se los devoraron los tiburones y no lo creyeron. A fuerza de investigaciones privadas lograron hasta hoy que el tema siga vivo: a partir de consultas de Clarín, la Fuerza Aérea informó ayer que se están realizando "gestiones institucionales y extra institucionales a efectos de poder analizar si existen nuevos elementos de juicio respecto del accidente del avión TC 48". Entre estas gestiones, se pidió a la Fuerza Aérea de los Estados Unidos "todos los archivos que pudiesen aportar" y a nivel interno "se ha ordenado una completa recopilación de todos los antecedentes". También dijeron que se apoyan firmemente las "nuevas investigaciones" que se pueden realizar "por medios electrónicos, laséricos y satelitales". Este último párrafo no es inocente. Hace dos años el Gobierno de Costa Rica le pidió al de Estados Unidos ayuda para encontrar los restos del avión en la selva ubicada las montañas de Talamanca. "Tenés que verla para entender que ahí todo se puede perder. Es un brócoli con árboles de 50 metros de alto. Por lo bajo, tenés 70 centímetros de hojas mojadas y podridas. Caminando 8 horas se recorre un kilómetro", dice desde Italia Cecilia Viberti, hija de uno de los pilotos, que estuvo tres veces en ese lugar. Desde el John Space Center de la NASA nombraron al doctor Shaun Sullivan, consultor del Departamento de Defensa, para que coordine la búsqueda. Decidieron hacerla con una sensor láser, una tecnología en desarrollo del Massachusetts Institute of Technology (MIT). El desafío técnico era atravesar las múltiples capas de la selva cerrada para poder mapear el terreno. Pero encontraron follaje que refleja la energía láser. Y también pendientes muy empinadas que dificultan el trabajo. No encontraron al TC 48, pero probaron la nueva tecnología. Para el año próximo se espera que haya mejoras en el hardware, el desarrollo de una nueva generación de sensores que permita regresar a la selva. Los familiares de los caídos no dudan que el avión está en la selva del sur de Costa Rica. El libro "TC 48, el avión de los cadetes", escrito por Ricardo Becerra, ex teniente del Ejército y hermano del cadete Héctor, menciona a trece testigos que lo vieron volar a baja altura en zona selvática. Estos testimonios y la comunicación radial que el avión mantuvo con un piloto "tico" (costarricense) son elementos clave que sostienen la hipótesis de que el avión cayó en tierra, y no en el mar. La asociación civil "Familiares de desaparecidos del avión TC 48", presentó en Córdoba hace dos años una denuncia en la fiscalía federal N«ø 3, a cargo de Graciela López de Filoñuk. Se denunció el mal estado del avión, que voló con una sobrecarga de 19 pasajeros, y pidió que se investigue. ¿Qué buscan? "Que encuentren el avión, y la verdad", contesta Regina Zurro, que tenía 8 años la última vez que vio a su padre, Mario, comandante. ¿Pueden estar vivos? "Sí, y si no lo están, queremos sus restos. Son argentinos y tienen que descansar acá". Fuente: CLARIN.

Informe sobre el TC 48 - Parte 1

Informe sobre el TC 48 - Parte 2

Un testimonio de relevancia han sido las declaraciones del camarógrafo Julio Serbali que tiempo atrás relató lo siguiente:

Me tocó ser testigo de la trágica caída del TC-48 como camarógrafo. En aquel tiempo, trabajaba en Reporter Esso y Canal 12 y fui invitado a hacer el viaje de fin de curso de los cadetes de la Escuela de Aviación, junto a un periodista de La Nación. Yo viajaba en el TC-43, el otro avión. El 1º de noviembre de 1965, el presidente Arturo Illia nos despidió en Mendoza; pero, el TC-48 salió por otra ruta aérea y nos encontramos por primera vez en Antofagasta, Chile. De allí volamos hacia Lima, donde pernoctamos, y luego salimos rumbo a Panamá (también ahí pasamos la noche). La siguiente escala era en San Salvador, con pista de aterrizaje en El Salvador. Allí debíamos esperar a la tripulación del TC-48; pero, pasaron unas horas, y el avión no llegaba. En un momento, el brigadier Benigno Andrada nos reunió y nos dijo que el avión había entrado en emergencia y se había perdido todo tipo de contacto con él. La situación fue caótica para todos: los cadetes se afligieron mucho por sus compañeros y yo también me sentí afectado, pese a que no era de parte de la promoción. Aunque hasta ese momento nuestro vuelo había sido perfecto, me dio miedo pensar que, en las condiciones en las que viajábamos, también podía ocurrirle algo malo a nuestra nave. El brigadier resolvió que regresáramos a Panamá y, estando allí, nos hicieron escuchar una grabación del último mensaje que había emitido por radio el piloto del TC-48. “Tengo fuego en el motor número tres, me voy a tirar hacia la playa para tratar de aterrizar”, decía. Después de eso se escucharon unos gritos. De los cadetes, supongo. Al día siguiente, nuestro piloto salió a buscar al TC-48 con el objetivo de reproducir su ruta y aproximarse a la zona en donde habría caído. Yo me quedé en la base Howard de Panamá –que entonces era la más grande del mundo– filmando a los más de 20 aviones que salían a buscar la nave. Al día siguiente, el piloto volvió a hacer el recorrido; esta vez, yo iba en el avión con la cámara filmadora. Íbamos al ras del agua y se podía ver todo. De regreso, observamos un salvavidas, valijas y gorras. Yo lo vi y filmé todo en primeros planos. Aunque no aterrizamos a buscar los elementos, avisamos a la base norteamericana para que enviara lanchas en busca de los hallazgos. Y ese mismo día, a la noche, el Brigadier Andrada llamó a la tripulación y nos mostró todo lo que habíamos visto en el mar: tres gorras, chalecos salvavidas color naranja y unas valijas. Los salvavidas decían ‘Prefectura Nacional Marítima, República Argentina’ y los elementos estaban identificados con los nombres de los chicos. Todavía recuerdo que los chalecos estaban arrancados y chamuscados, lo que me dio a pensar, con mucha tristeza, que se los habían comido los tiburones. Creo que el incendio del motor produjo la explosión del avión, en el aire, pero no puedo saber en dónde se cayó. Desde aquel día, muchos padres vienen a buscar 'la verdad' en mi testimonio... Yo sólo digo lo que vi.

Otro punto poco claro fueron las declaraciones de más de una docena de testigos que aseguraron haber visto u oído al TC-48 sobrevolando tierra. Analizando caso por caso, no hay coincidencia en los horarios, las posiciones, las direcciones de vuelo ni incluso en la descripción de la aeronave; con lo cual dichos testimonios no pueden tomarse como válidos.

Clarín.com » Edición Lunes 22.07.2002 » Sociedad » Falsa alarma sobre el hallazgo de un avión argentino perdido en 1965

UN MISTERIO DE MAS DE 36 AÑOS: EL TC-48 DE LA FUERZA AEREA QUE DESAPARECIO EN COSTA RICA

Falsa alarma sobre el hallazgo de un avión argentino perdido en 1965Unos campesinos denunciaron que encontraron restos en un cerro y se pensó en el avión que desapareció con 69 oficiales y cadetes a bordo. Anoche se confirmó que se trataba de una avioneta.
Horacio Aizpeolea. DE LA REDACCION DE CLARIN.La leyenda del avión militar desaparecido hace 36 años en el sureste de Costa Rica fue desempolvada ayer en ese país: cuatro campesinos encontraron los restos de un avión en el Parque Nacional de Chirripó y, entre las hipótesis que se barajaron, inmediatamente surgió la del legendario TC-48, el avión desaparecido el 3 de noviembre de 1965, con 69 oficiales y cadetes de la Fuerza Aérea Argentina a bordo. Pero la ilusión duró sólo unas horas, a las 21.15 de anoche el coordinador de búsqueda y rescate de la Aviación Civil de Costa Rica, José Campos Matamorro, aseguró a Clarín que se trataba de un error y que los restos "de ninguna manera pertenecen al avión argentino".Según Campos Matamorro, "los restos hallados son de una avioneta caída hace 19 años con tres tripulantes. El rescate de esos restos se hizo hace 10 años, pero algunos trozos de la máquina quedaron en el lugar. Ahora unos campesinos que creían que había recompensa por el avión argentino filmaron un video casero y lo vendieron a un canal de TV, pero está muy claro que se trata de otra máquina".¿Por qué? Según Matamorro, "en el lugar hallaron una hélice completa, y el tamaño es mucho más pequeño del que tiene una hélice del TC-48. Además, el avión argentino era plateado y celeste, y lo que se halló tiene la pintura casi intacta y de color verde".Funcionarios de la Dirección de Aviación Civil costarricense llegaron este fin de semana hasta el sitio, ubicado cerca de uno de los puntos más altos del parque nacional, a unos 140 kilómetros al sureste de San José.El hallazgo del fuselaje ocurrió hace siete días pero la información se conoció ayer a partir de una nota publicada en el diario La Nación de Costa Rica. La televisión, en tanto, difundió repetidamente las imágenes del video casero en el que, con dificultad, se aprecian los restos del fuselaje de un avión. Los campesinos, dijeron los medios, habrían entregado a las autoridades "dientes y un pequeño hueso" hallados en el lugar. Pero los funcionarios de la Aviación Civil lo desmintieron rotundamente.El TC-48 (sigla que los medios de prensa en los sesenta tradujeron como "Tango Charles") había despegado el 3 de noviembre de 1965 de la base estadounidense de Horward, en Panamá, con destino a El Salvador. La nave, un Douglas DC-4 de la Fuerza Aérea Argentina, recorría con 59 cadetes argentinos, otro de nacionalidad peruana y 9 oficiales, un largo viaje con escalas, empezado en Mendoza y con California como destino final. Al avión lo acompañaba su par, el TC-43, con otros cadetes a bordo, en vuelo de instrucción."En Panamá despegaron con una diferencia de 5 minutos entre sí", le recordó ayer a Clarín un vocero de la Fuerza Aérea Argentina. Sólo el TC-43 llegó a destino.En el aeropuerto de Tegucigalpa, Honduras, hubo un pedido de auxilio del TC-48. Un alerta similar fue escuchado por un piloto de un vuelo comercial de la aerolínea costarricense, Lacsa. En ambos casos, desde el avión militar argentino se informaba que uno de los cuatro motores se estaba incendiando.En diciembre de 1967, la Cancillería argentina recibió un comunicado del gobierno de Costa Rica en el que se daba por cerrada oficialmente la búsqueda del avión. Hasta ese entonces sumaban 23 las expediciones exploratorias en la selva. Varias de esas incursiones fueron protagonizadas por miembros de la Guardia Civil costarricense y familiares argentinos de la tripulación desaparecida. También se efectuaron más de 50 vuelos en avionetas y helicópteros para coordinar la búsqueda por la zona de Talamanca.La desaparición del avión argentino se transformó en un mito inagotable. Entre las versiones figuró aquella que indicaba que los desaparecidos en realidad habían sido tomados prisioneros por una tribu indígena, según publicó en noviembre de 1967 el diario costarricense La República.Las crónicas periodísticas describieron paso a paso la desesperada búsqueda que hicieron el capitán Juan Tomilchenko y Orlando Bravino, padres de dos cadetes. Se concentraron en la selva, contrariando la información oficial argentina que siempre sostuvo que el avión cayó al mar.En el diario La Prensa Libre se habló inclusive de un "pueblo fantasma", en el centro de la selva, donde estarían viviendo los sobrevivientes. El mismo diario también publicó el hallazgo en la selva, nunca confirmado, de un árbol con un grabado de un avión cuatrimotor.Ayer, un vocero de la Embajada Argentina en Costa Rica le dijo a Clarín "no tener información oficial nueva" sobre el desaparecido avión militar. "Sabemos sólo lo publicado en los medios", agregó.Igual declaración emitió ayer la Fuerza Aérea Argentina. El vicecomodoro Jorge Reta le dijo a Clarín no tener "nada nuevo" sobre el episodio. "Para nosotros es un caso cerrado, cuya conclusión fue aportada por una investigación hecha por los Estados Unidos", dijo."El avión tuvo un problema de motor y la causa final fue descripta como ''impacto contra el mar'' entre Panamá y Costa Rica, sobre el Caribe, a 30 kilómetros de la costa", recordó el militar.Dijo que "se hallaron en el mar unos treinta salvavidas, gorras, impermeables, y otras pruebas que volvieron contundente a aquella investigación". Para la Aviación Civil de Costa Rica, en cambio, "el avión está en algún lugar de la selva".Una cuadrilla de la Cruz Roja y de la Policía se encontraba ayer en la zona del hallazgo del fuselaje. Según las fuentes de la Aviación Civil de Costa Rica, el avión accidentado hace 19 años sería de matrícula hondureña.La información conocida ayer sobre los restos hizo que los principales medios de prensa de San José de Costa Rica enviaran periodistas a la zona del hallazgo. El misterio del avión argentino sigue tan vigente como hace 36 años.

Informe de la Fuerza Aérea Argentina sobre los resultados de la Misión Esperanza III Llevada A Cabo desde el 26 de abril al 17 de mayo de 2009 en Costa Rica. Objetivo: encontrar los restos del avión Douglas DC 4 - TC 48 - de la Fuerza Aérea Argentina.

Alguien sugirió

Antes del decolaje del TC-48 de Howard, en forma confidencial y secreta fueron subidas a bordo 4 cajas pequeñas de madera cuyo contenido era partes de motores del Sistema ORION 1, los cuales eran trasladados a la NASA para realizar pruebas de lanzamiento (que se llevarían a cabo desde el Chamical), hasta no ser hallados los restos de la aeronave lo mencionado no puede ser probado fehacientemente pues no existe documentación alguna (si alguna vez existió alguien se encargo de hacerla desaparecer ya que no convenía su aparición por ser esta una bárbara negligencia cometida). El Capitán Esteban Jose Viberti al irradiar la emergencia la misma fue captada por su par (el T-43) quien haciendo caso omiso continuo vuelo hacia destino sin prestar la debida atención a sus camaradas en emergencia.

El 3 de noviembre de 1965 desaparece en la selva de Talamanca, en Costa Rica, el avión argentino TC 48 con 68 personas entre cadetes, oficiales y suboficiales de la Fuerza Aérea Argentina. Nunca se los encontró, y el misterio se convirtió en leyenda en Costa Rica. Sin embargo en Argentina, la posición oficial fue olvidar. A 43 anos, la historia se revierte y la Fuerza Aérea decide escuchar los reclamos de los familiares, se inicia una nueva búsqueda y se renuevan las esperanzas. El periodista German Zamora, siempre apoyo el caso e investigo con seriedad. Los resultados están en este programa "7 Días" de la TV de Costa Rica.

Desaparicion del Avion Argentino TC 48 - Programa 7 Dias - Parte 1

Desaparicion del Avion Argentino TC 48 - Programa 7 Dias - Parte 2

Costa Rica, Lunes 28 de septiembre de 2009

Nuevo intento de hallar avión argentino desaparecido en 1965

Publicado: 2009/09/28 04:52 PM
Buenos Aires (AFP). Dos oficiales de la Fuerza Aérea Argentina (FAA) partieron hacia Costa Rica en misión humanitaria para intentar ubicar los restos de un avión TC-48 desaparecido en 1965 con 68 ocupantes, la mayoría cadetes, en la Cordillera de Talamanca, informó este lunes la FAA.
Se trata de la expedición "Esperanza IV" y el objetivo es develar el misterio que rodea la desaparición el 3 de noviembre de 1965 de un avión Douglas DC-4, matrícula TC-48, cuando volaba entre Panamá y El Salvador con cadetes del último año de la Escuela de Aviación Militar, señaló un comunicado.
La búsqueda -la cuarta- se realizará en una zona selvática catalogada como "la más difícil del mundo", pero las autoridades tienen esperanzas de que resulte positiva por el avance tecnológico, se indicó.
Esta nueva expedición "es posible merced a los avances tecnológicos y científicos disponibles en la actualidad, especialmente en el área de imágenes satelitales del alta resolución tanto fotográficas como de radares de última generación", agregó.
La búsqueda en la selva se prolongará por unos 20 días y estará a cargo de una expedición conjunta que integran los tenientes argentinos Juan Gómez y Mariano Mohaupt y un grupo de especialistas costarricenses en selva y alta montaña.
La mayoría de los que viajaban en el avión siniestrado eran jóvenes, casi adolescentes, ya que pertenecían a la 31 promoción de la Escuela de Aviación Militar y como premio de su graduación se dirigían hacia Estados Unidos.
La de Costa Rica fue una de las peores tragedias de la aviación argentina.