Últimamente, siento que tengo fríos los pies siempre, pero al tocarlos no lo están. ¿Podría ser este un síntoma de algo que se avecina?
RESPUESTA del Dr. John Jones, Centro Vascular, Mayo Clinic de Rochester en Minnesota, Estados Unidos:
A pesar de que para precisar la fuente exacta de los síntomas es necesario realizar un examen físico y pruebas de diagnóstico, una posible causa para sentir frío en los pies, sin que realmente lo estén, es tener un problema neurológico como neuropatía periférica.
Naturalmente, hay muchas razones para que los pies se enfríen y la más obvia es el ambiente frío, combinado a la falta de calzado adecuado o de medias. De igual manera, el sudor frecuente o constante (hiperdrosis), generalmente producto del nerviosismo o de literalmente “quedarse helado en los pies”, también puede provocar frío en los pies, sobre todo si la evaporación produce un enfriamiento rápido. Por otro lado, los pies igualmente pueden enfriarse cuando el flujo sanguíneo no es bueno en las arterias que los abastecen. Sin embargo, en todas estas circunstancias, los pies están realmente fríos al tocarlos.
Por lo general, la sensación de frío en los pies es benigna y no existe ninguna causa grave subyacente. No obstante, sentir frío en los pies sin que realmente lo estén podría indicar un problema nervioso, como la neuropatía periférica que es capaz de provocar ese síntoma. La neuropatía periférica ocurre a consecuencia de un daño nervioso ocasionado por alguna lesión o trastorno médico subyacente. La diabetes es una de las causas más comunes para neuropatía periférica, aunque la enfermedad también puede derivar de una deficiencia vitamínica, de problemas metabólicos, de enfermedades del riñón o hígado, así como de la exposición a toxinas. La neuropatía periférica también se puede heredar y, en ocasiones, nunca se descubre la causa para la enfermedad.
Los nervios periféricos son todos aquellos nervios que se encuentran fuera del cerebro y médula espinal (sistema nervioso central). La neuropatía periférica generalmente empieza en los nervios más largos del cuerpo, que son los que llegan hasta los dedos de los pies; por eso, los síntomas normalmente aparecen primero en los pies y luego, en la parte inferior de las piernas. Otros síntomas posibles de la neuropatía periférica son el sentir entumecimiento, hormigueo, ardor o pinchazos en los pies y piernas que pueden extenderse hacia las manos y brazos, además de dolor punzante o ardiente y sensibilidad al roce. Según la neuropatía periférica avanza, la persona podría perder la sensibilidad, perder la coordinación y presentar debilidad muscular.
Usted debe acudir al médico para evaluar su situación. Si el médico sospecha una neuropatía periférica u otro daño nervioso, hay varios exámenes que podrían realizarse para descubrir la fuente subyacente del problema. Para ayudar con el diagnóstico, el médico posiblemente hable con usted respecto a sus antecedentes médicos y le realice un examen físico y neurológico que incluiría una revisión de los reflejos, de la fuerza y tono muscular, de la capacidad de sentir ciertas sensaciones, así como de su postura y coordinación.
Aparte, se le podrían hacer exámenes de sangre para revisar el nivel de las vitaminas, la función de la tiroides, los niveles del azúcar sanguíneo, además de la función hepática y renal, porque todo esto también puede afectar los nervios. Además, el médico podría sugerirle que se someta a un examen electrofisiológico, conocido como electromiografía (EMG), y a un estudio de la conducción nerviosa. Ambos exámenes miden las señales eléctricas de los nervios periféricos y cuán bien transmiten los señales a los músculos.
En algunos casos, podría ser necesario realizar una biopsia del nervio (procedimiento en el cual se extrae un pedazo pequeño de un nervio sensorial cerca del tobillo para buscar anomalías) y exámenes por imágenes, como resonancia magnética o tomografía computarizada, para determinar la causa del daño nervioso.
Es importante que un médico evalúe su situación pronto. Si la fuente del problema fuera la neuropatía periférica y la sensación de frío en los pies sólo un síntoma de ésta, usted podría encontrarse en las etapas iniciales del trastorno y en ese caso, quizás todo lo necesario sería descubrir y tratar la causa subyacente del daño nervioso. En cambio, si se deja avanzar el daño nervioso, la persona puede llegar a sentir dolor y presentar otros síntomas que podrían ser más difíciles de tratar con éxito.
viernes, 13 de mayo de 2011
Sentir frío en los pies sin que realmente lo estén podría indicar un problema neurológico
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario