Todos esperamos que nuestros hijos no se enfermen, pero a menudo la enfermedad es difícil de evitar. No tienes que preocuparte por una gripe común o gripe estomacal leve, pero asegúrate que tu niño tome suficientes líquidos y descanse. Es importante prestar atención a los cambios en el comportamiento de tu bebé o en su aspecto con el fin de detectar una enfermedad más severa.
Comunícate con su médico si tu hijo:
Tiene fiebre de:
100,4° F (38° C) o más (para los bebés de dos meses y menores). Llama a su médico, incluso si tu bebé se ve bien.
101° F (38,3° C) o más (para los bebés de tres meses de edad hasta los 6 meses de edad). Llama a su médico, incluso si tu bebé se ve bien.
102° F (38,8° C) a 102,9° F (39,4° C) (para los bebés de seis meses o más). Observa su comportamiento. Llama a su médico si la fiebre aumenta o persiste por más de dos días.
103° F (39,4°C) o más (para los bebés de seis meses o más). Llama a su médico, incluso si tu bebé no parece estar enfermo.
Llora más o si el patrón normal de su llanto cambia cuando lo levantas.
Tiene vómitos o diarrea constante.
Tiene dificultad para respirar. Hace un ruido sibilante o chillón al respirar. En los recién nacidos, este sonido acompañado de retracciones notables en el pecho o un color azul pálido en la piel son razones para buscar atención médica inmediata.
Tiene una o más convulsiones.
No responde (está inconsciente) o demuestra flaccidez o debilidad.
Antes de llamar al médico, asegúrate de hacer una lista de lo siguiente para ayudarlo a diagnosticar correctamente a tu hijo:
Los síntomas de tu bebé.
Su historial médico.
Cualquier cambio en la cantidad de comida que tu bebé haya consumido.
Su temperatura actual y si ha tenido fiebre.
Los medicamentos (recetados, de venta libre, remedios caseros o naturales) que le hayas dado a tu bebé en las últimas 24-48 horas.
Es importante que mantenga la calma cuando tu bebé no se siente bien. Recuerda que el estar enfermo ya es una situación estresante para tu angelito. Ten en cuenta que no siempre hay una solución rápida y fácil para aliviarlo. Recomendamos que llames a su pediatra primero, ya que está familiarizado con tu bebé y con su historia médica. Pero si no te puedes comunicar con su médico y empeoran los síntomas de tu bebé, llévalo a la sala de emergencias (urgencias) más cercana.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario