jueves, 3 de marzo de 2011

Aromaterapia

Los aromas producen estados de equilibrio o desequilibrio en nuestro organismo, la aromoterapia nos ayuda a recuperar la armonia y el equilibrio corporal.
Desde la antigüedad, los perfumes han jugado un rol importante dentro de las civilizaciones. Los que usaban perfumes y ungüentos perfumados, eran los egipcios. Ya que por la sequedad del clima y los excesos de sudoración, necesitaban hidratar la piel y darle aromas, con unos aceites perfumados, que las mujeres llevaban especialmente en las pelucas. A través del tiempo los romanos y los griegos adoptaron mucho el tema de perfumarse y de ambientar las habitaciones con perfumes. y los primeros ungüentos afrodisiacos, se podría decir que se utilizaban en Roma y en Grecia. Los árabes tomaron las ideas de los romanos y los griegos y perfeccionaron los sistemas de extracciòn de las esencias de las flores, cortezas y otros. Empezaron el comercio de los perfumes, que lo expandieron por Asia, Europa y África.

Hacia el 370 a.c. una persona asociada a Aristòteles fuè la primera persona que planteò el tema del efecto que puede producir un aroma o perfume. Se dice que habìa hecho un catàlogo de diferentes perfumes; esa persona se llamaba Teofrasto. El concepto de aromaterapia es mucho màs nuevo, recién a principios del 1900, una persona investigò el tema, Renè Maurice, un francès que era quìmico y cosmetòlogo. Actualmente hay una gama extensa de diferentes aromas y sus posibles acciones, se utilizan en tratar de cambiar las vibraciones de los hogares, y tambièn las vibraciones astrales o el campo áureo.

Aquí van algunas de las màs usadas:
Bergamota: para la depresiòn y la ansiedad.
Cedro: sedante, disminuye el stres.
Ciprés:  tranquilizante.
Enebro: tònico y estimulante.
Eucaliptos: antiséptico y descongestivo.
Geranio: antidepresivo, y estabiliza las emociones.
Incienso: para hacer meditaciones, y limpieza astral.
Ilang-ilang: afrodisìaco, estimula los sentidos.
Lavanda: sedante, despeja la mente, ayuda a dormir.
Limón: estimulante mental, aumenta la concentraciòn.
Mandarina: estimula la alegrìa.
Naranja: positivador, ayuda a un mejoramiento social.
Patchouli: antidepresivo, afrodisìaco.
Pino: vigorizante y antiséptico.
Romero: desinhibe, activa la memoria, y alivia la fatiga.
Sàndalo: alivia las tensiones, estimulas las emociones.
Jazmín: afrodicìaco, para la mejor confianza en sì mismo.
Maderas de oriente: para las meditaciones espirituales.
Madre selva: para desbloquear los miedos y las culpas.
Magnolia: disminuya los miedos a lo desconocido.
Rosa: para cargar el campo áurico, estimula el amor y la conecciòn a los demàs. Para la fraternidad.
Citronella: para repeler insectos.
Ámbar: vigorizante, te conecta con la tierra.
Canela: para los pensamientos positivos.
Cedro: potenciador masculino. Anti stres.
Frutilla: afrodicìaco. Para dar fuerza de voluntad.
Lila: se la utiliza para hacer ofrendas, y pedir a las energìas superiores.
Musk: afrodicìaco.
Miel: positivador y energizante.
Nardo: para atraer trabajo.
Opium: para atraer parejas. Para salir de la soledad.
Reina de la noche: para las mujeres, para atraer hombres.
Ruda: contra las enrgìas negativas, y las envidias.
Tilo: para relajar el sistema nervioso.
Violeta: contra la desesperaciòn, distiende los mùsculos.
Manzanas verdes: para atraer trabajo, atraer gente, y aumenta la autoestima.
Azahar: para regular las energìas de la casa. Atrae suerte.
Mirra: depurativo astral, y aleja las enfermedades.
Calèndula: sabiduría y estabilidad.

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